miércoles, 21 de noviembre de 2018

Soñe que estaba en un sùper






Soné que estaba en un súper
caminaba entre sus estantes
con la desorientación propio de los sueños
Había estantes de productos limpieza, bebidas, comidas
y en el medio de esos pasillos
Estaba un estante de venta de libros
era pequeño comparado con los otros
pero con una buena cantidad
de material bibliográfico
apilados, desordenados
inquietos como perros en adopción
Junto a un mostrador de madera
estaba una mujer, que los firmaba
tenia una cartera sobre el respaldo de una silla
donde sacaba lapiceras de distintos colores, un teléfono
para sacar fotos, un bloc de hojas
para apuntar palabras, fechas, ideas
un reloj de sol que hay dentro no servia
y un reloj de arena para medir
el paso del tiempo de una pregunta.
Rescatado de un juego de mesa
los libros todos eran iguales,
podrían ser que todos fuesen una novela
un tratado de filosofía
una selección de poemas
la mujer,que firmaba los libros
luego de una breve atención
encuentro , con su lector
su pelo le cubría su mirada
era joven aunque ya no lo era
luego de brindarles unas palabras
volvía a la búsqueda de un nuevo lector
Los libros eran como los que estaban en los estantes
apilados dentro de varias cajas, en el suelo, sobre sillas
O los que nos veían desde dentro de una vitrina
lo que hacia distinto un libro
a otro, era su dedicatoria, un brebajes
de letras manuscrita, con su breve firma cursiva
A veces, según su contento, dibujaba una flor
Una golondrina en un breve cielo, el paso alto de un arrollo
La silueta de un niño, sosteniendo el vuelo de barrilete
Las alas de una sonrisa , una solitaria hoja de otoño
Se podía comprar dos o más libros
y ella escribiría tantas dedicatorias
como libros vendía
porque al final, era lo único
que sus lectores leían.


miércoles, 14 de noviembre de 2018

Ella se oculta de mi vista



Ella se oculta de mi vista
como el sol se oculta
en un día nublado, detrás sus nubes
Quizás porque tengo
estos años acuesta
Llevo este infortunio en mi rostro
Pero son años...
Que solo e pensado en ella
Como las monedas de oro, solo nos atesora
la dicha, como cada minuto de ella, de su ensoñación
nos aleja de la muerte, de la misma nada.



Tema sugerido
Brian Eno - An Ending

jueves, 8 de noviembre de 2018

No lo hagas llorar




Hubo un tiempo
en que los psicólogos
Escribían en las revista de moda
hablaban, por las pantallas de mayor encendido
En los atrios de las grandes ferias
Que había dejar llorar a los niños
Es más, aconsejaban
No intervenir con prerrogativas ni dádivas
en el llanto de un pùber
Ese desconsuelo, moldaría un carácter
 Carácter , que se haría fuerte en la adversidad
y los guijarros que hay en el camino
Fue así que hubo una generación
que hemos llorados a baldes llenos
Hasta juntar fuentones de lagrimas de sal
y llanto de mar
Pero la industria del entretenimiento
vio ahí, que en esas lagrimas, no había un negocio
dio que nuestras lagrimas se asemejan
más al agua de lluvia, a la tristeza
que se amontonan en un vidrio empañado,
al solitario charco de un aguacero
que al contenido mismo, que ellos envasan
y venden en quioscos y kermesses
Así que dieron a entender, que era mejor
para la pròxima generación, una risa fácil
el afiche histérico de una familia sonriente
hacer que la vida fuera alegre, así que vendieron
más botellas y todo lo que hay en la mesa de una fiesta
 y es por eso que es tan malo llorar
Ayer fue que pasaba dos mujeres con un niño
el niño desconozco el motivo, de por iba llorando
La mujer más joven, le dijo a la otra,
No lo hagas llorar...
Y ese”No lo hagas llorar”, retumbo
en mi psique, como retumba los golpes
en el parche de un tambor
nunca supe si cumplió la mujer
con esta petición
o si el niño, con el correr de los años
continuo llorando, así, sin saber
muy bien el motivo, de por que razón
vienen sus lagrimas , el llanto triste
 amargo de los años.


domingo, 4 de noviembre de 2018

Cuando la conoció




Cuando la conoció
Ella traía una nube atada a una soga
La paseaba como si llevara un globo
¿Por qué no la soltás y dejas que se vaya?
Es una nube que nació en cautiverio, le sugirió
No sabe ser, como las otras nubes
Confundiría a los meteorólogos
A las señoras de tapado de vison
La gente saldría abrigada los días de sol
Y los días de lluvia, se mojaría
Hasta agarrarse un resfriado
Y no hay peor cosa
que ver una nube enferma... Te lo puedo asegurar
La soga era larga y fina
Como las que tiene los saquitos de tè
¿Por qué no usar saquitos de tè  como tampones?
En vez de salirte sangre coagulada
Te saldría té, y serias igual que una tetera
A la mujer, no le gusto esta asociación libre
Tan repentina como inapropiada
Cada veinte días, la naturaleza
Se la antojaba que ella fuese madre
Y cada mes se lo recordaba
Y se caí esa posibilidad en sacos rotos
Cada doce veces al año
Una  cuatrocientas veces,  en su vida
¿A que viene tanta insistencia?
¿No se da por vencida la naturaleza?
No le gusto que le recordaran todo eso
Ni que llevaba una nube atada a un cordel de saquito de tè
Ni mucho menos andar con un sobrecito entre las piernas
Hay días que no quiere hablar con nadie
Que se la ve pasar como apurada
Seguida por meses y años que pasan detrás suyo
Como siguiéndola, como un séquito de noteros y apuntadores
¿Y la Nube? Le pregunto un vez que la vio pasar apurada
¿Con quien se queda la Nube cuando no quieres hablar con nadie?