Que en el verano, tenían su generosa sombra
y al llegar el otoño
cambiaban de color sus frondosos follajes
hasta perder por completo todas
y cada una de sus hojas
Hasta terminar con la totalidad
de sus ramas desnudas
Había también, pequeñas flores
de lo de más distintos colores y perfumes
Que atraían abejas, mariposas de infinitas especies
Había pájaros, aves
que llegaban anidar
con últimos meses del invierno
Los días eran diferente
por que ellos a su vez, siempre lo eran
de ninfa a mariposa , de flor a semilla
había un tiempo diferente, en sus orillas
Con un distinto transitar y no un mero trámite
Ahora hay una pared de por medio
Que evita que lo veamos
Alguien quiso
que no miremos los árboles y los pájaros
Ni supiéramos de la llegada del invierno
o de su ocaso, que no nos distraigámonos
Ni por un asomo, nos creyéramos libres
Al ver volar una semilla de un cardo.
