miércoles, 25 de noviembre de 2009

Mañanas uniformes


Cecilia no competía con el pizarrón
con un crucifijo colgado
con las paredes que hablan
ni con los profesores
de voces extrañas

Cecilia me abstraía del sueño
como una fruta temprana
en su piel llevaba
la urgencia de la mañana

Sus pecas competían
por un lugar en su cara
Cecilia compartía su banco
de risa,
la clase de historias
de llanto.

Siempre me esteriquia
que tenia novio
pero a mi eso poco me importaba
solo me afectaba
traslucir su camisa blanca

Lo que podía entrever en el espacio
que había en cada uno de sus botones
o ver como su camisa
con el paso del tiempo
se hacían mas transparente

Como se traslucía
su naturaleza a través
de delicados filamentos
que se entrelazaban caprichosamente
como nubes en el cielo
verme en su piel blanca
de leves tintes rosados
en su proximidad de banco.

Sin razón veía
como se me iba la mañana
tratando de desprender
un instante
de su mirada.

Era su camisa un eterno ruego
de libertades y de vuelos
su pollera sin haber nacido
moria de una muerte temprana
allí junto a sus piernas
estaba la noche mas calida

Sus medias grises
a modo de soquetes
siempre tan lejos del suelo
como la razón
estaba lejos nuestro

Que desterrada era Cecilia
fuera de la escuela
que distinta era la vida
sin su pollera.




Love is a many splendored thing

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