De comprar una nueva cama
A tirar pared abrir puertas
Hacer una nueva sala
Hicimos el amor en la cama de sus padres
Casi no le di ni tiempo de sacar sus cuerpos
El fuego, el agua, son impredecibles
Lo hicimos tantas veces
Que hasta perdido la cuenta
Del goce que llevamos
Y eso pretendíamos llevar
Un pormenorizado recuentro de nuestros actos
Pero las miradas no se cuentan
Y siempre se mira como la primera vez
Todos dicen que estoy más hermosa
Si algo de hermosura me faltara
Como si mi cuerpo fuese de arcilla o parcela
Y su cuerpo la suave sustancia
Que se le extrae por medio mecánico
al fruto del olivo
Casi que no me importa
Si me comparar con una tinaja, una posesión
Le quitan crédito a mi progreso
Los trapos con los que visto
El tiempo que tardo, a la hora que vuelvo
Los que los otros ojos aseveren
Me tiene sin cuidado
¿De que van hablar sino…?
(De lo que esta echa la materia
Del goce de nuestra mirada)
Nuestro amor es tan infinito
Que solo me preocupa una cosa
Que las estrellas un día se acaben
No hay comentarios:
Publicar un comentario