Una mujer que sabe a golosina

Una mujer se detiene frente a un kiosco
Repleto de chicos
En pleno horario de la entrada a un colegio
Y dice, Tengo gusto a chocolate
Mientras se prueba un brazo
Y pone cara de que es cierto
¿A ver? (que es la forma de decir que tienen los chicos
Cuando quiere probar algo,
Que no es comida, ni remedio, ni mucho menos un material didáctico)
Los primeros prueban desconfiado
Porque esa es una mujer que parece ser adulta
Y es de chico desconfiar de los adultos
El que esta más cerca, le pasa la lengua por uno de sus codos
Viene otro que no le había llevado plata, para comprar golosinas
le prueba un poquito mas arriba de la mano
Donde el brazo se hace más gordo, como una mejilla
Y no faltan las chicas que no creen lo que dicen
Los demás chicos y tienen envidia de todo
El quiosquero que no sale de su negocio
Presta atención, lo que pasa en la esquina
Con la severidad de los que la saben todo
Por ejemplo, que una mujer nunca dice la verdad
Ni mucho menos, cuando parecen ser dulce a los ojos
Y los chicos se arremolinan como gorriones
Sobre la sobras de una miga de pan
Y la mujer no se cansa de recibir degustaciones
Criticas, y pedidos al por mayor
Mucho más abajo mucho mas arriba
Hay lugar para recibirlos a todos
Vienen y van los chicos con sus bocas llenas
De algo parecido a una sonrisa
Pero que no les sientan tan mal como las caries
Una vez de haber probado
A la mujer que se dice saber a chocolate, dulce de leche
a otras golosinas
Que es la primera mujer, que se derrite en una vereda.